El láser y la ablación de macrófagos: tratamientos para eliminar tatuajes
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¿Sabías que seis de cada diez personas se arrepienten de sus tatuajes? En esta nota te contamos cómo el láser y la ablación de macrófagos pueden ayudarte a lucir una piel libre de tinta.
La causa principal por la que muchos quieren sacarse los tatuajes es laboral. También suele ocurrir que el diseño elegido no queda bien o que las circunstancias de la vida cambiaron y ya no queremos llevar una marca sobre la piel que hace referencia al pasado. Lo cierto es que solo el 40% de los tatuados no se arrepiente, el resto busca soluciones para borrarlos.
Borrar los tatuajes con láser
El láser es el tratamiento más solicitado y utilizado para borrar los tatuajes. Es el único que destruye las partículas de tinta completamente y permite que sean eliminadas por el sistema linfático.
El láser se aplica sobre el tatuaje sin dañar el tejido aledaño. Se pueden utilizar distintos tipos de láseres: el Q-Switched (Alejandrita y Neodimio-Yag) es uno de los más populares, junto con el Picosure. Algunos doctores utilizan también el Láser V-Beam. Aunque el procedimiento es similar, el tiempo de aplicación del láser sobre el tatuaje difiere según el aparato empleado por el especialista, el tamaño del tatuaje, la pigmentación sobre la piel y el tipo de piel del paciente.
El láser actúa rompiendo las partículas de tinta que se dividen en partículas más pequeñas reabsorbidas por los macrófagos y se eliminan de manera natural por el sistema linfático. Se trata de un procedimiento seguro, sin riesgos para el paciente. El número de sesiones depende del dibujo y de los pigmentos utilizados.
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La importancia de los macrófagos
Los macrófagos son células del sistema inmunitario que están presentes en los tejidos de nuestro cuerpo. Como el resto de los leucocitos o glóbulos blancos, se originan en la médula ósea y cuentan con funciones protectoras y fagocitarias. Son importantes para los procesos de recuperación de tejidos, pues l se encargan de absorber las células muertas, acelerando el proceso de regeneración celular y la curación.
Además, estas células sanguíneas se alimentan de las partículas de tinta y ayudan a eliminarlas. El principal riesgo de los tratamientos para eliminar tatuajes es que los macrófagos pueden ser desplazados hacia otro lugar por medio de la quimiotaxis debido a factores quimiotácticos, lo que hace que estas células y los pigmentos que han ingerido se concentren es lugares como los ganglios o los vasos linfáticos. La toxicidad de la tinta de los tatuajes puede resultar nociva para el organismo en esos casos.
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La ablación de los macrófagos en el proceso de eliminación
Científicos del Centro de Inmunología de Marsella-Luminy y de la Universidad Aix-Marsella descubrieron por qué los pigmentos de los tatuajes se mantienen en el cuerpo toda la vida y cómo evitar el riesgo de que terminen en los vasos linfáticos o en los ganglios.
Los macrófagos fagocitan las partículas de tinta de los tatuajes y aunque estas células mueran los pigmentos son absorbidos por otros macrófagos, por eso la tinta sigue en el cuerpo y los tatuajes duran toda la vida.
Si el uso del láser se realiza conjuntamente con la ablación de los macrófagos, los riesgos se reducen y las partículas de tinta se expulsan del cuerpo de manera natural por el sistema linfático. La combinación de ambos métodos en el tratamiento de borrado de tatuajes hace que la técnica sea más segura.
Si querés saber más sobre la eliminación de tatuajes podés entrar a nuestro foro y consultar con otras personas interesadas por el mismo tratamiento.
