Los mejores tratamientos para la celulitis
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La celulitis es un problema que preocupa a muchas mujeres. También se da en los hombres pero es más frecuente entre la población femenina. Contrario a lo que se piensa, no está solamente relacionada con el sobrepeso sino también con problemas hormonales, de circulación, genéticos e incluso la falta de hidratación.
Si bien la celulitis no constituye un riesgo para la salud y en pocos casos se convierte en celulitis infecciosa, en general no causa más que problemas a nivel estético. Lo malo es que es muy difícil de eliminar e implica necesariamente la adopción de hábitos saludables de alimentación y un cambio en el estilo de vida, con más actividad física, sin tabaco y con bajo consumo de alcohol.
¿Qué es la celulitis?
La celulitis es una patología del tejido subcutáneo. Se debe a una mala alimentación, a factores genéticos, hormonales o a un estilo de vida sedentario. Es un problema difícil de eliminar aunque hay varios tratamientos que resultan bastante efectivos para reducirla visiblemente o controlarla.
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Presoterapia
La presoterapia es uno de los tratamientos más utilizados para tratar la celulitis y en general suele dar muy buenos resultados. Es un tratamiento médico y estético que utiliza la presión de aire para realizar un drenaje linfático. Consiste en aplicar presión de aire sobre las zonas del cuerpo afectadas mediante el uso de unas botas especiales. Se produce así una compresión seguida de un relajamiento que ayuda a activar el sistema linfático y a eliminar la grasa acumulada.
Cada sesión dura entre 30 y 45 minutos aproximadamente. La secuencia de masaje de compresión y descompresión (inflar y desinflar las botas) se realiza entre 10 y 20 veces. Es un tratamiento que resulta también beneficioso para tratar las várices, edemas y piernas hinchadas, posoperatorio de la liposucción, entre otros.
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Radiofrecuencia
La radiofrecuencia consiste en la aplicación de ondas electromagnéticas para reafirmar la piel y reducir el volumen corporal. Es también un tratamiento no invasivo y con pocas sesiones pueden verse buenos resultados. La Radiofrecuencia produce un calentamiento profundo que afecta a la piel y tejido graso subcutáneo. Favorece el drenaje linfático y la eliminación de líquidos y toxinas reactivando la circulación.
Carboxiterapia
La carboxiterapia es un tratamiento eficaz para la celulitis. Consiste en la aplicación de microinyecciones de CO2 en la zona afectada para tonificar la piel y mejorar la circulación, combatiendo la celulitis, la flacidez cutánea y los problemas circulatorios.
El CO2 se utiliza para las reacciones metabólicas, entre ellas la combustión de las grasas. Esto da como resultado una mejora en la calidad de la piel, una disminución de volumen de la zona y el alivio de los síntomas que acompañan a la celulitis, como la pesadez.
Ozonoterapia
En la ozonoterapia lo que se hace es oxigenar los tejidos afectados con ozono inyectado. Se utiliza una aguja pequeña de unos 3 milímetros y se reparten entre 200 y 250 cm3 de oxígeno en la zona a tratar. Esto activa la circulación y ayuda a eliminar la grasa localizada. Para ver resultados hay que hacer entre 15 y 20 sesiones de 10 minutos de una a dos veces por semana.
Cavitación
La cavitación es otro de los tratamientos más populares cuando se trata de luchar contra la celulitis. Es otra técnica no invasiva que consiste en aplicar, de forma controlada, microburbujas de aire dentro del tejido graso. Esto se hace con la ayuda de un rodillo especial. Es un tratamiento reafirmante y modelador que actía sobre los depósitos grasos localizados y libera la grasa a través del sistema linfático y de la orina.
Mesoterapia
La mesoterapia es una técnica que consiste en inyectar pequeñas cantidades de medicina homeopática debajo de la superficie de la piel. Para ello se utilizan agujas muy finas que mejoran la circulación local y reducen los depósitos de grasa localizada. La mesoterapia estimula la producción de colágeno, rompe la celulitis, mejora la circulación, favorece el drenaje linfático y venoso, y actúa sobre la grasa.
Ultrasonidos
El ultrasonido consiste en la aplicación de un haz de ultrasonidos de baja frecuencia sobre la zona afectada por la celulitis. Así se rompen las células de grasa del tejido adiposo, permitiendo que sean luego eliminadas a través del sistema linfático, la orina y el sudor.
Liposucción
Los tratamientos no invasivos que te comentábamos antes suelen dar muy buenos resultados. Sin embargo, hay casos especiales que requieren un paso por el quirófano. La cirugía que se realiza para tratar la celulitis y eliminar la acumulación de grasa es la liposucción. Se opta por esta técnica cuando las demás no dan resultado o la grasa localizada no desaparece con dieta sana y ejercicio.
El procedimiento es muy sencillo aunque requiere de una instancia de posoperatorio para conseguir los resultados buscados.
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Cómo evitar la celulitis
La celulitis es un problema que afecta a personas de todas las edades. Lo ideal es seguir una dieta sana y equilibrada, evitar consumir grasas y carbohidratos y optar, en cambio, por frutas y verduras. Hay que estar bien hidratado, consumir al menos dos litros de agua al día, y reducir el consumo de sal para evitar la retención de líquidos.
También es conveniente eliminar el consumo de alcohol y de tabaco. Y no puede faltar el ejercicio físico, que debe ser practicado de forma moderada pero a diario. El ejercicio ayuda a tonificar los músculos, mejora la circulación y es de gran ayuda para combatir la celulitis.
También se recomienda aplicar todos los días una crema anticelulítica. Muchas de estas cremas cuentan con activos que rompen las cadenas lípidas y ayudan a eliminar la grasa localizada.
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