De acuerdo con la Sociedad Argentina de Medicina Estética, la obesidad y el sobrepeso pueden definirse como una acumulación de grasa excesiva., que puede ser perjudicial para la salud. Esta acumulación de tejido adiposo guarda relación directa con el consumo de alimentos cuyo aporte energético excede al que el cuerpo realmente necesita.
Una dieta es un plan de alimentación diseñado por un profesional de la salud para el paciente con la finalidad de que este obtenga los aportes requeridos de proteínas y vitaminas, protegiendo la masa muscular y regulando el gasto metabólico, mientras se logra el descenso de peso o la perdida de masa grasa, según explica la Dra. Romina Terminiello.
Estos programas para adelgazar indican al paciente sugerencias sobre los alimentos a consumir, como prepararlos y cocinarlos, así como ideas para organizar las comidas para lograr el descenso de peso deseado. Para obtener los resultados deseados, el régimen debe ser personalizado y adecuada al estilo de vida, hábitos y biología del paciente.
Una dieta es un proceso de reeducación nutricional que está acompañado de un cambio de hábitos para llevar una vida más saludable, tales como:
La mayoría de las veces, una dieta se prescribe con el propósito de perder peso, sin embargo, este no es el único motivo para iniciar un plan alimenticio, como paciente podés requerir un nuevo modo de alimentación restaurativo o necesitar cambiar los requisitos dietéticos por enfermedades como la diabetes.
Iniciar un régimen no se trata solo de querer perder peso, sino de mejorar el estilo de vida en general, ya que los beneficios no son solo estéticos. La Sociedad Argentina de Medicina Estética explica que las dietas diseñadas por un profesional de la salud toman en cuenta la composición corporal y valoración de la salud general de paciente, así como sus necesidades calóricas y objetivos personales, de esta manera no solo le ayuda a alcanzar sus metas estéticas sino que le ayuda a disminuir los factores de riesgo de enfermedades crónicas como enfermedades cardiovasculares, hipertensión, diabetes, entre otros.
Es por esto que se debe evitar las "dietas milagro" ya que al no ser equilibradas, sanas o guiadas por un profesional, pueden desencadenar efectos secundarios negativos como el efecto rebote, la perdida de masa muscular y líquidos, déficit de proteínas, desordenes alimentarios, entre otros.
En la Argentina el 50% de la población adulta tiene sobrepeso u obesidad, mientras que un 30% de los niños y adolescentes se encuentran también en este margen. La obesidad es un problema de salud crónico definido por la Organización Mundial de la Salud como una acumulación excesiva de grasa causada por factores como la mala alimentación y el estilo de vida sedentario. Los problemas de obesidad están en aumento debido a cambios en los hábitos alimenticios como el consumo de alimentos altos en grasas, azúcar y sal. Todo esto pone en riesgo al paciente de sufrir enfermedades crónicas y hasta algunos tipos de cáncer.
Para establecer si un paciente tiene sobrepeso se utiliza como parámetro el IMC o índice de masa corporal, es el calculo de la proporción de la grasa en relación a la grasa magra del cuerpo. Este se calcula diviviendo el peso de la persona por sus dimensiones en metros cuadrados (kg / m²). Tu IMC te ubicará en alguna de las siguientes categorías:
Si decidís llevar a cabo un régimen, ya sea un niño o un adulto, es esencial consultar siempre a un profesional de la salud: un nutricionista o un dietista. Hay muchas diferencias entre nutricionista y dietista, puedes distinguirlos de esta manera: un dietista es un médico, mientras que un nutricionista es un biólogo que se especializa en ciencias de la alimentación. La principal diferencia entre ambos es que el primero puede diagnosticar, recetar medicamentos y analizarlos, mientras que el segundo es un "educador de nutrición".
Ya sea que elija un nutricionista o un dietista, debés verificar con anticipación que esté certificado por los organismos de salud como la Sociedad Médica Argentina, la Sociedad Argentina de Nutrición o la Sociedad Argentina de Medicina Estética, para brindarte la atención profesional de calidad que necesitas.
Durante la primera visita con un dietista o nutricionista, el especialista llevará a cabo una evaluación completa de tu cuadro clínico. El médico debe hacerte preguntas para conocer tu estilo de vida, historial médico, necesidades y expectativas. Este cuestionario debe ir a profundidad para conocer tus hábitos alimenticios, cuáles alimentos consumes y cómo organizas tus comidas para detectar donde pueden hacerse cambios para mejorar tu nutrición.
El índice de masa corporal se medirá con el plicómetro, una herramienta especial de pinza o con la báscula de bioimpedancia elèctrica que calcula la grasa, el peso, los líquidos corporales, etc. Es posible que se prescriban exámenes médicos para descartar ciertas patologías y tener una mejor referencia de tu salud. Según la Dra. Georgina Vidal Bianchi, esta visita debe repasar los siguientes puntos:
La consulta debe terminar con el diseño de un plan personalizado de alimentación que el paciente seguirá en las próximas semanas y se deben establecer las futuras visitas de control, así como otras herramientas de seguimiento que el profesional pueda ofrecer.
Según la Sociedad Argentina de Nutrición una dieta saludable es aquella adaptada a las características individuales y biología del individuo. El primer paso es visitar a un nutricionista o diestista que hará una evaluación detallada de la historia médica, sus hábitos alimentarios, y estado físico incluyendo el registro de su peso, talle, cintura, porcentaje de masa muscular y grasa, entre otros. Con este panorama claro, se diseñará la a seguir personalizada a las necesidades, objetivos y gustos particulares del paciente, para facilitar su seguimiento.
Tras esta primera consulta, el paciente deberá asistir a visitas de seguimiento de forma constante ya que es allí que su progreso será monitoreado y registrado, el médico anotará sus medidas y peso, también hará nuevamente una entrevista para evaluar posibles modificaciones que faciliten el seguimiento del plan.
La duración depende de lo que el profesional de la salud defina en su plan de nutrición. Aunque pueda ser un desafío lo principal es apostar por una alimentación que se adapte a tus posibilidades y patologías de presentarlas, cualquier dificultad debe ser compartida con el médico y atendida por este. Recordá: el objetivo fundamental es la perdida de peso sostenible, el programa de alimentación debe estar acompañado de recomendaciones de hábitos saludables que puedan ser sustentables en el tiempo como el ejercicio diario y técnicas de manejo de estrés.
Si bien algunos métodos han demostrado ser efectivos, otros han sido señalados por sus efectos secundarios e impacto en el organismo y la salud a largo plazo. Aquí encontrás las 10 dietas más populares:
Las dietas permiten perder cantidades considerables de peso lo cual modifica la silueta dela persona, sin embargo, posterior a esto los tejidos de la piel se ven afectados: el efecto del "vaciado" o flacidez excesiva se puede ver en los brazos, nalgas, estómago, pecho y rostro. Para corregir este y otros problemas se puede recurrir a procedimientos quirúrgicos como un lifting facial o la lipoescultura que, como explica el Dr. Marcos F. Alberto, se refiere a un método para extraer tejido adiposo localizado, devolviendo la armonía al cuerpo y resaltando los progresos logrados.
Para mantener los resultados obtenidos, el profesional de la salud de seguimiento te aconsejará y brindará una dieta de mantenimiento. Según explica la Dra. Romina Terminiello, en la etapa de mantenimiento el paciente debe contar con una red de apoyo, asesoría de actividad física, y un seguimiento de su entrenamiento de conocimiento nutricional, para que pueda perpetuar los buenos hábitos adquiridos en el tiempo, adaptándose a sus necesidades especificas como sus gustos, estilo de vida, alergias, horario y tipo de trabajo, nivel de actividad física, etc.
Una dieta realizada sin asesoramiento profesional puede tener efectos negativos en la salud. La Sociedad Argentina de Nutrición, afirma que toda dieta es un cambio en la alimentación que tiene un impacto en el organismo y en la psiquis del paciente, por lo cual es necesario que sea realizada por un especialista certificado y que el plan esté adaptado a las necesidades especiales del individuo.
Una dieta desequilibrada o no supervisada puede tener efectos perjudiciales como:
Antes de que seleccionés una dieta a seguir, debés visitar un profesional que realice un análisis físico y que diseñe un plan para perder peso de forma gradual y sostenible como modo de vida.
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