Las orejas de perro después de la abdominoplastia
En algunos pacientes que se realizan cirugía abdominal aparece un pliegue o engrosamiento alrededor de la cicatriz. Aunque no son normales, sí son esperables. Te contamos cómo tratarlos en esta nota.
Los pliegues que quedan al costado de la cicatriz después de una cirugía abdominal se conocen como orejas de perro. En la abdominoplastia se retira una importante cantidad de tejido graso y de piel sobrante en la zona del abdomen. Para ello, el cirujano debe realizar una incisión importante que permita trabajar sobre toda la zona del abdomen para eliminar el excedente de piel y grasa y para reforzar la musculatura de la pared abdominal.
La cicatriz resultante de la operación suele ser bastante importante. Se trata de dejarla escondida debajo de la ropa interior y en general no presenta mayores problemas estéticos, cicatriza con normalidad. En otros casos, con la ayuda de láser se puede mejorar su apariencia con el paso del tiempo. Pero hay algunos casos en los que la incisión deja unas secuelas en la piel, una especie de abultamiento a ambos lados de la incisión y que no queda bien estéticamente.
La causa de las orejas de perro
La causa de las orejas de perro suele ser el ángulo en el que se realiza la incisión. Se hace en 45 grados, no tendrían que manifestarse. Pero si el ángulo es mayor o menor, puede que se acumule tejido en los extremos de la cicatriz.
El tamaño de la cicatriz depende de la cantidad de grasa y piel que el cirujano tenga que retirar. Para calcular el ángulo de la incisión, el médico tiene que valorar el tamaño de la cicatriz, es decir, la cantidad de piel que tiene que cortar. Entonces, para poder respetar dicho ángulo, puede que tenga que realizar una incisión mayor que evite que se creen esos pliegues o abultamientos.
↪️ Relacionado: Tips para deshincharte después de una abdominoplastia
Cómo eliminar las orejas de perro
Si después de la cirugía, durante el postoperatorio o el proceso de recuperación nos damos cuenta de que el abdomen no quedó como esperábamos, es importante consultar con el cirujano que te atendió para que vea si la hinchazón es normal o es un caso de orejas de perro. Si es lo último, entonces una solución es abrir nuevamente y alargar la cicatriz unos centímetros. Si se retocan los extremos de la incisión y se alarga su tamaño, se puede tensar la piel y evitar el exceso de tejido a ambos lados de la cicatriz.
Otra alternativa, también viable y recomendada por los médicos, es realizar una liposucción en la zona abdominal para retirar la grasa y los tejidos sobrantes que ocasionan estas orejas de perro. Esta técnica es efectiva únicamente si lo que sobra de piel no es demasiado. Además, la liposucción no tensa la piel, solo aspira la grasa. Si la piel en exceso está flácida, entonces tampoco mejorará demasiado.
La mejor recomendación es que si durante el proceso de recuperación se observan abultamientos anormales o pliegues en la zona cercana a la cicatriz, se debe acudir a la consulta con el médico especialista para que valore el caso, diagnostique y proponga una solución eficaz que no traiga problemas posteriores al paciente.
↪️ ¿Te hiciste una abdominoplastia y pensás que te quedaron orejas de perro? Compartí tu experiencia con la comunidad de estéticas en nuestro foro.