El tratamiento de la ginecomastia
Existe una tendencia cada vez más marcada en las consultas de cirugía estética para el tratamiento de la ginecomastia masculina. Se trata de un problema en el desarrollo de las mamas en el hombre, que provoca el aumento del volumen de la glándula mamaria. Es importante la consulta médica para determinar si se trata efectivamente de una condición glandular o si se asocia a la lipomastia, es decir, al exceso de grasa en la mama.
¿Cuáles son las causas de la ginecomastia?
La ginecomastia se asocia a menudo a los desequilibrios hormonales, tales como el aumento de la prolactina o estrógenos en sangre, a la disminución de la cantidad de testosterona o a una excesiva conversión de testosterona en estrógeno.
La pseudo ginecomastia puede estar asociada al aumento de peso o a la acumulación de grasa en el área del pecho. En la mayoría de los casos se presenta una ginecomastia con lipomastia.
Las técnicas quirúrgicas para tratar la ginecomastia
Antes de determinar un tratamiento quirúrgico, se recomienda al paciente realizar algunos análisis clínicos para descartar la existencia de problemas de tiroides, de la glándula pituitaria, del hígado o de los testículos. En algunos casos, el aumento de estrógenos puede compensarse con medicamentos.
No existen contraindicaciones importantes para quienes realicen esta operación. Por lo general se trata de pacientes jóvenes que gozan de buena salud. Lo importante es tener en cuenta el aspecto psicológico de la consulta, para que no haya excesivas expectativas puestas sobre el resultado.
El objetivo de la cirugía es reducir el tamaño de los pechos, otorgándole un aspecto masculino. Si el componente de grasa es el que predomina, entonces se hará una liposucción. Si, en cambio, el problema proviene de la glándula, se quitará el exceso de la misma a través de incisiones en el borde de la areola. En la mayoría de los casos, ambos métodos van asociados.
Antes de la cirugía se recomienda evitar el consumo de aspirinas o antiinflamatorios no esteroideos.
El post-operatorio
Esta intervención se realiza por lo general con anestesia local con sedación, por lo que no requiere hospitalización. El paciente no sentirá fuertes dolores y las molestias se controlarán con analgésicos. Durante los primeros días después de la operación, debe utilizarse una banda de contención. Al poco tiempo, el paciente podrá retomar sus actividades cotidianas.
Los resultados son inmediatos y el edema desaparece a los pocos meses. No suele haber complicaciones, aunque en algunos casos puede darse una leve asimetría en el volumen de las mamas.